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Antenas: el origen de todos los males...

Fuentes oficiales nos confirmaron que, hace algunos años, hubo un par de siniestros en los que la compañía de seguros hizo sentar en el banquillo a sendos Jefes Provinciales de Inspección de Tele­comunicaciones (JPIT) por su presunta responsabilidad sobre las res­pec­ti­vas instalaciones aprobadas...

Aunque ya nos suponíamos que debía haber algun motivo para que el Ministerio tuviera tanta fijación con las antenas de radioaficionado desde el 2006, nuestras sospechas fueron confirmadas en la reunión del 2012 con Telecomunicaciones, en la que su máximo responsable, D. Carlos Carrascal, nos contaba lo que decíamos al principio.

Según él, 2 casos sobre 52 Jefes provinciales (3,84%), era excesivo y se debía actuar para protegerlos.

Nuestro punto de vista, que le dejamos bien claro inmediatamente, era otro bien distinto: 2 casos sobre 30.000 radio­afi­cio­na­dos (0,0066%) era insignificante, pero si lo comparábamos con el punto álgido de la radioafición en España, con 60.749 licencias en 1996, el 0,0033% resultante era aún más insignificante y, por lo tanto, a todas luces injustificado dictar medidas que afectasen a todo el colectivo, como la de obligar a que nuestras instalaciones las realizase un profesional. Esto es lo que se llama pagar justos por pecadores.

Por si esto fuera poco, también argumentamos que, después de más de veinte años de experiencia ofreciendo el servicio de Seguro de Antenas a miles de usuarios, sólo UN siniestro importante habíamos tenido que cubrir (0,00005%).

Nuestra confianza en los radioaficionados que instalan sus propias antenas es absoluta. Pensamos que, en muchos casos, antes se caerá la casa que la antena, pues las medidas de seguridad acostumbran a estar muy sobredimensionadas.

Con el tiempo, los efectos adversos de la norma estaban a la vista: la brutal caída del número de radio­aficionados, sobre todo desde su publicación en 2006.

Sin embargo, el Sr. Carrascal no se ha querido mover ni un ápice. Todo por eximir de responsabilidades a los JPITs, quienes, según él, muchos no son Ingenieros de Telecomunicación, ni tan siquiera Abogados. Entonces, ¿qué clase de "profesionales" ponen al frente de las Jefaturas? Así nos va...

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